a San Domenico di Guzmán o.p. (1212 d.c.) y al Beato Alano della Rupe o.p. (1464 .c.)
- Yo (María), prometo mi protección especial y mi gran agradecimiento,a aquellos que recitarán devotamente mi Rosario.
- Yo (María), prometo un agradecimiento especial a aquellos que perseverarán en mi Rosario.
- El Rosario será un arma muy poderosa contra el infierno: destruirá vicios, libre de pecados, disipará herejas.
- El Rosario hará florecer virtudes y buenas obras, y obtendrá a las almas, las misericordias divinas más abundantes.
El Rosario reemplazará en los corazones, el amor de Dios por el amor del mundo;
El Rosario se eleva al deseo de los bienes celestiales y eternos. ¡Cuántas almas serán santificadas por este medio! - Los que confían en mí, (María), con el Rosario, no entrarán en perdición.
- Aquellos que recitan devotamente mi Rosario, meditando sobre sus misterios, no caerán en desgracia: si pecador, se convertirá; si es justo, crecerá en gracia, y será digno de la vida eterna.
- Los verdaderos devotos de mi Rosario no morirán, sin recibir primero los sacramentos de la iglesia.
- Quien recita mi Rosario, vivo y a la hora de la muerte será iluminado por Dios y recibirá gracias sin número, y en el cielo compartirá los méritos de los santos.
- Yo (María), liberaré instantáneamente del purgatorio las almas devotas de mi Rosario.
- Los hijos de mi Rosario disfrutarán de una gran gloria en el cielo.
- Lo que preguntes con mi Rosario, lo conseguirás.
- Quien difunda mi Rosario,será ayudado por mí en todas sus necesidades.
- He obtenido de mi hijo que todos los miembros de la Hermandad del Rosario tienen, por hermanos, a los santos del cielo, vivos y a la hora de la muerte.
- Quien recitará fielmente mi Rosario.es mi amado hijo, hermano y hermana de Jesucristo.
- La devoción a mi Rosario es un gran signo de predestinación para la salvación.